viernes, 22 de enero de 2021

LA VOLUNTAD  (Cualidad del Alma)

                                       
Se podría definir a la voluntad como la libre elección y por tanto la conducta de un ser autoconsciente basada en una reflexión inteligente.

Como principio es una característica de rango superior, o divina (no olvidemos que se sabe que los animales comparten cierto grado de psicología con los humanos, naturalmente en un nivel rudimentario pero carecen de voluntad.) 

La voluntad capacita a la mente humana a conseguir grados de consciencia, pasando desde una visión o estado mental subjetivo a expresarse de forma objetiva y experimentar así el destino de encontrarse con su divinidad.

El significado de la vida es su adaptabilidad, pero cuando la voluntad está presente  aparecen los estados superiores del ser,  pues el valor de la vida es su capacidad de progresar de una forma inteligente.

El conocimiento se puede demostrar, son datos. Si no se vivencian solo crece el ego (la superficial percepción de uno mismo).

La verdad se experimenta (a través de la voluntad en la búsqueda).  Es una experiencia del alma que produce crecimiento.

Todo lo que existe es un estado vibratorio, nada está inmóvil "TODO VIBRA" (3er principio de la Ley Cósmica).

Todo vibra y cuanto más alta sea esta vibración mayor será el nivel de conciencia en la jerarquía.

Y como todo, debe experimentarse en la materia. La voluntad en el cuerpo físico se sitúa en el entrecejo, en medio del frontal, conectada con la glándula pineal (la que ve). La que ve la misión y el proyecto terrenal del humano.

La voluntad como instrumento superior estará siempre al servicio del PROPÓSITO, el que nos ha traído hasta aquí. Y este está ya en el corazón desde el nacimiento. Corre por la sangre, está en el A.D.N. Sabemos que el propósito no es el fin sino la forma personal de recorrer el camino, la experiencia, la aventura de vivir.

Por eso voluntad y corazón deben ir unidos para cumplir la MISIÓN (y solo a ella se servirá con su-misión).

Así como la voluntad está en el entrecejo, la MISIÓN se sitúa en el centro del humano, en el pecho.

Pero las emociones acechan al propósito de evolución humana. Las emociones son las memorias vividas ancladas en la parte femenina del ser que quiere afianzarse en la Tierra para crearla y manifestarla aunque para ello olvide a menudo su propio destino. Esta sigue siendo la tarea, la parte terrenal que a menudo bloquea la celestial. No olvidemos que el humano es la zona intermedia entre el Cielo y la Tierra (M.Ch).

Nunca debe confundirse la voluntad con el intelecto, pues:
El intelecto es un pequeño foco de la Inteligencia, (o la capacidad de saber elegir lo mejor).  La Inteligencia es un pequeño foco de la Sabiduría.

El Intelecto utiliza el razonamiento (mecanismo de rastreo y posibilidades)

El Intelecto es mental.

La Inteligencia son ideas.

La Sabiduría es VISIÓN.